Don Felipe ha cumplido con la
tradición de la Familia Real de visitar al Cristo el primer viernes de
cada marzo
El Rey, este viernes en la Basílica de Jesús de Medinaceli . |
La
de hoy ha sido la segunda vez que Don Felipe venera esta imagen como Rey; la
primera fue en 2018, aunque ya había acudido a la basílica muchas veces antes,
como Infante de España y como Príncipe de Asturias. La visita de hoy es la
undécima.
Don Felipe ha llegado a la Basílica
hacia las 10:15 horas con la medalla de esclavo de honor de la
Real Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Medinaceli, de la que es su
protector. Esta medalla se la entregaron hace seis años, durante su primera
visita como Rey.
El Himno Nacional recibe al Rey
Cuando el Rey ha entrado en el templo,
ha sonado el Himno Nacional interpretado por el órgano, y
Don Felipe ha recorrido el pasillo central entre aplausos y saludando a los
devotos. Tras santiguarse, ha besado el pie de Jesús de Medinaceli, ha vuelto a
hacerse la señal de la Cruz y se ha quedado unos minutos rezando antes de pasar
a la Sacristía para firmar en el Libro de Honor y conversar con los frailes y
cofrades. Durante la visita, de unos 20 minutos de duración, Don Felipe ha
estado acompañado por Benjamín Echeverría, superior provincial de
los frailes capuchinos, orden que custodia la imagen de Jesús de Medinaceli.
Después, a la salida, el público que le
aguardaba le ha dedicado más aplausos y ha empezado a corear el nombre
del Rey. Don Felipe se ha acercado a saludar a algunas de las personas
que aguardaban tras las vallas y luego se ha ido en coche a entregar las becas
de Iberdrola.
Don Felipe ya fue de niño
La primera vez que Don Felipe acudió a
venerar esta imagen sagrada apenas tenía tres años, corría el año
1971 y acompañó a sus padres, que todavía eran Príncipes. Después regresó en
1976, junto a su madre, ya Reina, y sus hermanas, las Infantas
Elena y Cristina.
También fue muy significativa la visita
que hizo hace ahora 20 años, en 2004, cuando acudió con su entonces
prometida, Doña Letizia, tres meses antes de la boda real.
Con la visita de hoy, el Rey ha
renovado una tradición que se remonta a 1682, según la cual un
miembro de la Familia Real acude a venerar al Cristo de Medinaceli el primer
viernes de marzo. Durante su reinado, Don Juan Carlos acudió
once veces a venerar la imagen. Doña Sofía lo hizo una
quincena de veces antes del relevo en la Corona, pero ha seguido haciéndolo en
varias ocasiones después.
Una devoción que empezó en 1682
La devoción por Nuestro Padre Jesús
Nazareno tiene su origen en 1682, cuando llegó a Madrid la imagen
que había sido rescatada a los moros. Como tenía fama de ser muy milagrosa, se
organizó una procesión, a la que asistió la Familia Real, la nobleza y el
pueblo.
El Cristo había sido trasladado a la plaza fuerte de La Mámora (actual Mehdía, en Marruecos), para que rezaran los soldados españoles, pero cayó prisionero de los moros, que lo arrastraron por las calles de Mequinez y tuvo que ser rescatado por los Trinitarios que lo trajeron a Madrid.
Almudena
Martínez-Fornés
Fuente: El
Debate