Los obispos de Ghana pidieron al nuevo presidente del país, John Dramani Mahama, que promulgue la Ley de Derechos Sexuales Humanos y Valores Familiares, conocida en algunos sectores como "ley anti-LGBTQ+", durante una reunión celebrada este martes.
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Los Obispos de Ghana con el presidente John Dramani Mahama. Crédito: Presidencia de Ghana. Dominio público |
Una delegación
de prelados, encabezada por el Obispo Matthew Gyamfi, titular de Sunyani y
presidente del Episcopado, felicitó a Mahama por su victoria en las recientes
elecciones generales. Durante el encuentro, los obispos aprovecharon para
abordar el tema de la legislación pendiente.
El proyecto
propone penas de prisión de hasta tres años para quienes sean declarados
culpables de identificarse como LGBTQ+, y hasta cinco años para quienes formen,
defiendan o financien grupos LGBTQ+.
Actualmente,
las relaciones homosexuales son ilegales en Ghana, con penas de prisión de
hasta tres años. Esta legislación se enmarca en un contexto más amplio de
rechazo a las prácticas homosexuales en el país.
El Parlamento
ghanés aprobó la legislación en febrero de 2024, pero no entró en
vigor al no ser promulgada por el expresidente Nana Akufo-Addo antes del fin
del período parlamentario. El presidente Mahama explicó a los obispos que,
debido a esto, "ese proyecto de ley está efectivamente muerto".
Mons. Gyamfi
expresó claramente la postura de la Iglesia: "Lo que queremos es que se
convierta en ley". Los obispos argumentan que el proyecto está "en la
dirección correcta" ya que busca establecer derechos sexuales adecuados,
promover los valores familiares y proteger a los niños.
En diciembre de
2023, el Episcopado emitió un comunicado afirmando que "el Estado tiene un
deber que cumplir en el tema de la homosexualidad" y que sería legítimo
criminalizar los actos homosexuales mediante medidas punitivas, aunque
enfatizaron que no es correcto criminalizar a las personas por su orientación
sexual.
Mahama sugirió
que la mejor manera de avanzar sería presentar el proyecto como una iniciativa
gubernamental, lo que le daría mayor legitimidad. También subrayó la
importancia de la educación: "Si enseñamos nuestros valores en la escuela,
no necesitaremos aprobar una ley para hacerlos respetar".
Esta situación
cobra especial relevancia para la Iglesia Católica en África, considerando
el reciente rechazo de los obispos africanos a la declaración
Fiducia supplicans del Vaticano, que aprobó la posibilidad de bendecir a
"parejas del mismo sexo" y a parejas en otras "situaciones
irregulares".
Por Andrés
Henríquez
Fuente: ACI