El humorista donó a la casa, donde las guanelianas atienden a personas con discapacidad, el importe de su premio de MasterChef Celebrity
 |
| Los ganadores de Masterchef. Foto: TVE/Raúl Tejedor |
El cómico Miki
Nadal y el periodista de Cope Juanma Castaño han ganado recientemente la quinta edición de MasterChef
Celebrity, el popular concurso de cocina emitido por TVE. De esta forma,
cada uno ha conseguido 37.500 euros –la mitad del premio total– para donar a la
entidad que ellos elijan.
En el caso del
humorista, ha destinado su parte a la Casa Santa Teresa, donde las Hijas de
Santa María de la Providencia (guanelianas) atienden a personas con
discapacidad. «Aquí trabajamos las capacidades de las personas especiales, y
también su inclusión, sus derechos y su felicidad», explica sor Luisa López,
hermana de la comunidad y antigua colaboradora de Alfa y Omega, donde escribía
precisamente sobre esta labor.
Un trabajo que
Nadal conoce bien, ya que hace tres años estuvo de voluntario una temporada en
el centro. «Quedó impactado positivamente por lo que hacemos y por las personas
con discapacidad que atendemos, porque son ellas y ellos las que tocan el
corazón, no nosotras», reconoce la religiosa.
Tras esta
experiencia, en la que el cómico «se sintió acogido y querido», cada vez que
«ha ganado un concurso, ha entregado el dinero a la Casa Santa Teresa». De
hecho, «con este creo que ya son tres los premios que nos ha dado», subraya sor
Luisa López.
En esta
ocasión, «el premio ha llegado de forma providencial», asegura la monja haciendo
honor al nombre de su congregación. «El dinero que Miki ha conseguido es
justamente lo que necesitamos para cubrir una necesidad urgente que teníamos.
Ni un euro más, ni un euro menos. Mira, mientras te lo cuento se me ponen los
pelos de punta».
Por todo ello, sor Luisa aprovecha la ocasión para lanzar un mensaje al humorista: «Me gustaría decirle que estamos desbordadas por su solidaridad y por ese corazón grande que le caracteriza. Y que ha puesto donde se merecen a las personas con discapacidad. Estamos súper agradecidas», concluye.
José Calderero de Aldecoa
Fuente: Alfa y Omega
