Ayer el Custodio de Tierra Santa, Fray Francesco Patton, presidió la misa solemne en el santuario de Caná de Galilea, en el pueblo árabe de Kafr Kana, para conmemorar el primer milagro de Cristo
![]() |
Padre Patton preside la misa en la Iglesia de Caná en Tierra Santa |
"Aquí en Caná de Galilea, estamos invitados a comprender el pleno valor del amor humano, a partir del amor que Dios tiene por su pueblo y por toda la humanidad, que es como el amor del esposo por la esposa": lo dijo ayer el Custodio de Tierra Santa, Fray Francesco Patton, presidiendo una misa solemne en el santuario de Caná de Galilea, en el pueblo árabe de Kafr Kana, para conmemorar el primer milagro de Cristo.
El Custodio de Tierra Santa señaló a continuación que el
evangelista Juan coloca el pasaje del Evangelio de las bodas de Caná al
comienzo del ministerio de Jesús para dejar claro que el matrimonio entre Dios
y su pueblo se realiza en la vida, en el ministerio y en la Pascua de Jesús.
Luego añadió: "Estamos hechos para un amor infinito. Estamos hechos para
recibir el amor de Dios y corresponderlo en una relación tan intensa y personal
que sólo podemos encontrar una similitud en la imagen del matrimonio".
Debido a las restricciones impuestas por la emergencia del
coronavirus, a la celebración sólo asistieron los frailes de las comunidades de
Galilea, entre ellos los de Nazaret, del Monte Tabor, de Tiberíades y de Haifa.
Cada año, durante esta misa, muchas parejas abarrotaban la iglesia y renovaban
sus votos matrimoniales. "Se celebraba de una manera especial",
relata el párroco, Fray Haitham Franso Yalda Hano, "Muchos cristianos de
Galilea venían a renovar sus votos matrimoniales y el pueblo esperaba con
ilusión esto". Dada la ausencia de los feligreses, para cumplir con las
medidas sanitarias, el párroco aseguró que se dará un certificado especial a
las familias durante la Cuaresma, durante la visita para la bendición de las
casas.
La iglesia de Caná es un punto de referencia para más de tres mil cristianos locales, de los cuales 700 son católicos y los demás greco-ortodoxos y melquitas. Para respetar las normas anti covid, que permiten presencia limitada, las misas de los domingos se transmiten actualmente en la página de Facebook del santuario, cerrado debido al confinamiento.
En el convento contiguo prestan servicio tres franciscanos de la Custodia de Tierra Santa. Desde época bizantina varios testigos hablan de Kafr Kana como el lugar del primer milagro de Jesús, pero no hay noticias ciertas en los cuatro siglos precedentes. En 1641 los franciscanos de la Custodia de Tierra Santa adquirieron legalmente el Lugar Santo, pero sólo en 1862 lograron tomar posesión de él. En 1879, sobre las ruinas de una antigua basílica, se construyó la nueva iglesia con un convento, ampliada posteriormente entre 1897 y 1905. El altar de mármol y los frescos del Nazareno son obra de artistas bávaros, y como el párroco era de Salzburgo, se inspiró en la fachada de la catedral de su ciudad.
Las excavaciones arqueológicas, llevadas a cabo en 1969 por el Padre
Stanislao Loffreda y en 1997 por el Padre Eugenio Alliata, sacaron a la luz un
patio y los restos de una sinagoga con mosaicos con figuras geométricas y
granadas. El lugar de culto se construyó sobre los restos de viviendas
anteriores (siglos I a IV d.C.) y tenía un atrio porticado con una gran
cisterna en el centro, que aún se conserva hoy en día. Debajo de la iglesia
actual están los restos de una casa, donde se presume que tuvo lugar el primer
milagro de Jesús. Estos restos se han transformado en una cripta.
Tiziana Campisi - Vatican News
Vatican News