Una estatua histórica de la Virgen María derribada por una multitud hace
más de 100 años fue replicada y ubicada en el lugar original donde yacía en la
Ciudad Vieja de Praga (República Checa)
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Réplica de imagen mariana en República Checa.
Crédito: Petr Šálek (CC BY-SA 4.0)
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El 4 de junio
se colocó la réplica exacta de una estatua de la Virgen María del siglo XVII en
el lugar original donde se encontraba: la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga, en
República Checa.
El 3 de noviembre de 1918, la imagen mariana coronada con
estrellas y la columna de 52 pies sobre la que estaba fueron derribadas por una
multitud de hombres violentos liderados por el escritor Franta Sauer.
La réplica se
logró gracias al esfuerzo de una asociación de historiadores, artistas y
católicos que trabajaron por más de 30 años para recrear la imagen y obtener el
permiso de la ciudad para devolver la columna mariana a su lugar histórico.
“La columna
mariana”, como se la llama, se erigió en la plaza checa acompañada del “canto
de canciones marianas, del sonido de las campanas de la torre de la Madre de
Dios ubicada frente a Týn [Iglesia] y el aplauso de las personas presentes”,
dijo Karel Kavička, cofundador de la Sociedad para la Restauración de la
Columna Mariana en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga, a CNA, agencia en
inglés del Grupo ACI.
Kavička, que
tiene grados avanzados en Filosofía y Teología y está escribiendo un libro
sobre la historia y la restauración de la columna mariana, observó que durante
el evento los católicos checos expresaron su alegría por la colocación de la
estatua, pero también muchos protestantes y no creyentes, que apoyaron el
proyecto por su importancia histórica y artística.
La Sociedad para la Restauración de la
Columna Mariana en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga se estableció en abril
de 1990, “inmediatamente después de la caída del régimen comunista
totalitario”.
“Seguimos las iniciativas de nuestros
antepasados, que buscaron restaurar la columna inmediatamente después de su
demolición”, dijo Kavička. “Estas actividades fueron interrumpidas por la
ocupación nazi, la Segunda Guerra Mundial y luego el régimen comunista. Nos
prometimos que nuestra iniciativa sería la última en cumplir los deseos de
muchas generaciones”, añadió.
Para Kavička, por la historia de su país,
la reconstrucción de la columna mariana representa “una oportunidad para la paz
con la esperanza de un futuro mejor”. “Desde el principio, nos hemos esforzado
por hacer de este pilar un símbolo de reconciliación. ¿Quién puede ser un mejor
símbolo de paz que la Virgen María?”, dijo.
La estatua de María, ahora restaurada y
ubicada en la Plaza de la Ciudad Vieja de Praga, no es la única de su tipo en
la República Checa. En todo el país hay “docenas de columnas marianas en las
plazas de muchas ciudades”, señaló Kavička.
Estas estatuas de la época barroca, y en
algunos casos del Renacimiento, “fueron construidas por los ciudadanos y
representantes de estas ciudades para agradecerles su protección en tiempos de
epidemias y peste o para agradecer a la Virgen María”, añadió.
La estatua fue construida y erigida
originalmente por el emperador Habsburgo Fernando III, después del final de la
Guerra de los Treinta Años en 1648, como acción de gracias por el fin del
asedio del ejército sueco a Praga.
“El pueblo de Praga” quiso la estatua
original y “presionó al emperador Habsburgo Fernando III para que le permitiera
erigirla”, dijo Jan Bradna, un escultor y miembro de la Sociedad, a la BBC.
Kavička explicó que después del colapso del
católico Imperio Austrohúngaro la estatua de la Virgen María “se presentó como
un símbolo político, un símbolo de la esclavitud de la nación”. Después del
establecimiento de Checoslovaquia como una república independiente en 1918, la
Iglesia Católica fue asociada con la monarquía caída y fue difamada, añadió.
A ello le siguió la Segunda Guerra Mundial
y 40 años de régimen comunista, por ello, desde entonces, los creyentes
cristianos han sido una minoría en la República Checa, que es un país que tiene
una mayoría atea.
“La gente realmente no odiaba la estatua”,
dijo a la BBC Petr Vana, el hombre que esculpió la réplica de la estatua
mariana. Explicó que el derrocamiento de la estatua original se produjo debido
a un tumulto que Sauer azuzó en un pub.
Kavička dijo a CNA que no tenía pruebas de
que Franta Sauer fuera católico, pero se cree que probablemente lo fue, en
parte porque murió en un monasterio católico. Asimismo, señaló que existe la
creencia de que el final de la vida de Sauer se cuenta en “The Prague Legend”,
un poema de base histórica del poeta y dramaturgo checo Václav Renč.
En el poema se cuenta la historia del
derrumbe de la estatua mariana, dirigida por un entusiasta y bohemio joven
artista llamado Oskar. El poema relata el remordimiento de Oskar por sus
acciones, y cuenta que en su lecho de muerte en un hospital dirigido por
hermanas católicas recibió una visión de la Virgen María y tuvo una conversión
de corazón.
Fuente:
ACI