HOY EL RETO DEL AMOR ES QUE DEJES ESA SITUACIÓN EN LAS MANOS DE CRISTO SIN “POR SI ACASOS”

Por si acaso

Hola, buenos días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

Estábamos trasladando carretillas con unas baldas de dentro del Monasterio a otro sitio atravesando la huerta. Íbamos otra hermana y yo a cargar, cuando empezaron a caer unas gotas de agua; después, unas pocas más; luego, más... y ya parecía irreversible.

-Oh, oh... está lloviendo -le dije.

A lo que ella respondió mientras entrábamos:

-Vamos a rezar una Salve a la Virgen, para que pare un poquito. Siempre lo hago.
Sí, rezamos juntas, pero... en cuanto entramos, di la voz de alarma:

-¡Corred, que está empezando a llover, recoged todo!

Al poco, con la carretilla ya cargada, volvimos a salir fuera y... ¡había parado de llover! Ya ves que recé, pero no tardé en dar la voz de alarma “por si acaso”. Quise apañarlo todo un poco.

Es verdad que la fe no es una varita mágica, pero esta anécdota me interrogó sobre dónde tenía puesta la certeza.

Cuando decimos "amén", no estamos diciendo "sí" o "así es", sino "estoy convencido", "tengo la certeza", "estoy seguro". La palabra "amén" lleva en sí un enorme compromiso de fe.

Jesús es el "Amén de Dios". Él es la certeza misma, el sello de la acción de Dios. Él cumple en sí todo lo que el Padre dispone. Él es nuestra principal certeza, y el garante de que lo que creemos es cierto.

Para que tu certeza aumente, tienes que dejar que aumente tu experiencia de Cristo. Saber que Él actúa y sale por ti una y mil veces.

Hoy el reto del amor es que dejes esa situación en las manos de Cristo sin “por si acasos”, y le pidas ojos para reconocerle. Puede que pare la lluvia poniéndote en el camino una persona que te pueda ayudar, otra alternativa inesperada, una llamada, un giro de la situación...

VIVE DE CRISTO

Fuente: Dominicas de Lerma