Número
especial de Mundo Negro que se edita cada tres años en el que se ofrece un
compendio completo del continente africano con información actualizada
Un continente con mil 300 millones de habitantes,
de los cuales el 40% tiene menos de 15 años y el 60% no llega a los 25 años. Se
trata de África a la que la revista Mundo Negro, publicada en España por los
Misioneros Combonianos, dedicó un número especial.
Es una edición monográfica que se publica cada tres
años y que ofrece una "radiografía" del continente africano, con el
fin de tener, como dice el editorial, "África en la mano".
El número presenta una serie de comentarios, estadísticas y
dossieres de cada uno de los 55 países africanos, ofreciendo a los lectores una
imagen precisa pero ágil.
Entre los temas tratados se encuentra el de las migraciones, con un artículo que recoge las tesis presentadas por Stephen Smith en su libro "Escape to Europe". La mayoría de los migrantes africanos se trasladan de un país a otro en el mismo continente negro, mientras que solo una pequeña parte de ellos está tratando de encontrar su camino a Europa.
Estos últimos, señala Smith, son personas que
pertenecen a la naciente clase media africana. "El hecho de perder los
elementos más dinámicos o los más educados es una gran pérdida para
África", destaca Smith, según el cual incluso las remesas de los
emigrantes de Europa a África tienen un efecto negativo porque no alimentan un
circuito virtuoso para el desarrollo del país de origen, sino que permanecen
confinadas a las familias de los emigrantes.
La pérdida de capital humano tiene efectos negativos en la economía, la sociedad y la política de los países de emigración. "Para la construcción de una democracia es necesaria la existencia de una clase media. Los pobres no tienen tiempo ni oportunidad de dedicarse a la política, mientras que los ricos y poderosos tienen dificultades para colaborar en la construcción de la democracia". En conclusión, según Smith, "con la migración, África pierde".
A nivel eclesial, el p. Francesco Pierli, en su artículo "Unir, sanar y costruir" describe la evolución de la vida religiosa en una África en transformación, subrayando el papel social de la Iglesia que, en su actividad evangelizadora, acompaña el desarrollo de las sociedades locales gracias a su red de escuelas, centros de formación, hospitales y clínicas.
L.M.
Fuente:
Agencia Fides