2 Domingo Pascua (Ciclo C)
MONICIÓN DE ENTRADA
Buenos días, sed bienvenidos a la celebración del
Domingo de la octava de Pascua.
A lo largo de esta semana, como si fuera un único día,
hemos celebrado la victoria pascual del Señor, Jesús. Tan grande es este
Misterio de nuestra fe, que para introducirnos en él, la liturgia, con gran
insistencia, nos ha anunciado que en este HOY que ha durado una semana, en
verdad, el Señor ha resucitado.
Ciertamente, necesitamos escuchar este anuncio. Lo
necesitamos porque, si bien aceptamos que Cristo ha resucitado, nos cuesta
creer que también nosotros participamos de su victoria pascual.
Celebremos con gozo esta Eucaristía en la que el Señor
comparte con nosotros la vida que tiene con el Padre.
MONICIÓN A LAS LECTURAS
Desde pequeños hemos escuchado que Cristo ha
resucitado. Nuestros padres, catequistas y sacerdotes nos lo han transmitido y
nosotros hemos dado crédito a sus palabras. Nuestra fe se engarza en una cadena
de testigos; sin embargo, es necesario que creamos por experiencia propia.
Las lecturas que hoy vamos a escuchar nos
interrogan sobre nuestro encuentro con el Resucitado. Y nos invitan a poner en
la fe la condición para ese encuentro personal.
Escuchemos con atención las lecturas que hoy
se nos proclaman y de un modo especial sintámonos reflejados en el apóstol
Tomás.
ORACIÓN DE LOS FIELES
A cada petición
respondemos: ¡Danos, Señor, la gracia de
la fe!
- Por todos los
que formamos parte del Santo Pueblo de Dios, para que cimentados en la gracia
bautismal seamos testigos de la resurrección de Cristo. OREMOS.
- Por nuestro país que hoy celebra las elecciones generales, para que
los comicios trascurran con toda normalidad y nuestros políticos electos vivan
su cargo con responsabilidad. OREMOS.
- Por los cristianos
perseguidos, por los que han dado su vida por la fe en Cristo, para que les
alcance la gracia de la Resurrección y sean para nosotros estímulo de nuestra
vida cristiana. OREMOS.
- Por los que
están atrapados en las redes del pecado, para que confíen en la divina
misericordia y se abran al poder regenerador de la gracia divina. OREMOS.
- Por los
trabajadores en paro, por los que trabajan en precario, por los que no reciben
un salario justo, para que la legislación laboral proteja sus derechos y
dignidad. OREMOS.
-
Por todos nosotros para que en este tiempo pascual reavivemos nuestro bautismo
y seamos en nuestra vida ordinaria testigos del Resucitado. OREMOS.
ORACIÓN FINAL
Señor, Jesús, te adoramos y te bendecimos
porque por tu victoria pascual
te has convertido en el Alfa y la Omega de
la creación,
en el Viviente que vivifica la humanidad
y la das a participar de la Vida eterna.
Señor, Resucitado, Primero y Último,
a quien el Padre ha hecho primicia de su
gloria
y en quien ha querido recapitular todas las
cosas;
te pedimos que nos hagas participar
de tu victoria pascual.
Danos, Señor y Dios nuestro, la gracia
necesaria
para vencer el poder del Mal,
y el gozo de gustar ya la Vida
con la que Tú te gozas junto al Padre y el
Espíritu.
Espíritu de Jesús, Resucitado,
Tú que eres el Don que el Padre y el Hijo
nos envían,
ilumina nuestros ojos
para reconocer a Cristo presente en nuestras
vidas
y derrama sobre nosotros la gracia necesaria
para ser testigos de su resurrección
ante aquellos que caminan en tinieblas
y andan esclavos del pecado.
Amén.