“Dejarse
mirar y sorprender por el Niño que nace”. Es el deseo de una ¡Feliz Navidad!,
del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede
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Diócesis de Málaga |
“Gracias
a la ternura y a la misericordia de nuestro Dios, seremos visitados por un sol
que sale de lo alto para iluminar a los que están en tinieblas”. En estas horas
de espera del nacimiento del Niño Jesús, el Cántico de Zacarías, contenido en
el primer capítulo del Evangelio de Lucas, resuena en el corazón de cada
hombre. El sol que todavía nos visita hoy nos mira con amor, nos observa, está
cerca de nosotros y nos dice que ha nacido para nosotros.
Contemplar
para revivir la maravilla ante Jesús
“Detengámonos y miremos el pesebre:
entremos en la verdadera Navidad con los pastores, llevando al Niño Jesús lo
que somos”. Así es como el Papa Francisco, en un tweet del 25 de diciembre de
2017, nos exhortó a sorprendernos, a revivir el asombro de María, de José, de
los que siempre han contemplado ese pesebre, conmoviéndose por la alegría del
don del Niño de Belén. “Jesús – subrayó el Papa Francisco en la Audiencia
General del 27 de diciembre de 2017 – nace todavía en la vida de cada uno de
nosotros y, a través de nosotros, sigue siendo un don de salvación para los
pequeños y los excluidos”.
Llevemos
nuestras heridas a Jesús
Es en el pesebre donde Jesús, mirándonos,
escudriña nuestros corazones, asume nuestras preocupaciones y nos hace sentir
como sus hijos. “Que tu ternura – dijo el Papa en su homilía en la Misa de
Navidad de 2017 – despierte nuestra sensibilidad y nos haga sentir invitados a
reconocerte en todos los que llegan a nuestras ciudades, en nuestras historias,
en nuestras vidas”.
“Tu ternura revolucionaria nos persuade de sentirnos invitados
a asumir la esperanza y la ternura de nuestro pueblo”
“Llevamos
a Jesús lo que somos, nuestra marginación, nuestras heridas no sanadas,
nuestros pecados. Así, en Jesús, saborearemos –dijo el Papa Francisco en la
Misa del 24 de diciembre de 2016 – el verdadero espíritu de la Navidad: la
belleza de ser amados por Dios”.
“Con María y José estamos ante el pesebre, ante Jesús que nace
como pan para mi vida. Contemplando su amor humilde e infinito, digámosle
simplemente gracias: gracias, porque tú hiciste todo esto por mí”
Benedetta
Capelli – Ciudad del Vaticano
Vatican News