«Mi hija ha sido elegida por Dios para
cumplir una tarea y dar un mensaje». Con estas palabras despidió el párroco de
Santa María de Caná de Pozuelo de Alarcón (Madrid), Jesús Higueras, la homilía
por el alma de Diana Quer. Se las había dicho su madre, Diana López-Pinel,
antes de comenzar la ceremonia
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Los padres de Diana Quer |
El
cardenal arzobispo de Madrid, Carlos Osoro ofició ayer el multitudinario
funeral por Diana Quer en la parroquia madrileña de Santa María de Caná, en
Pozuelo de Alarcón. Los padres de Diana habían invitado a otros progenitores de
niños asesinados (todas niñas, menos el pequeño José Bretón) cuyas historias
han despertado el interés de la prensa en los últimos años.
Al
funeral asistieron los padres de la sevillana Marta del Castillo, de la pequeña
Marí Luz (su padre es pastor evangelista), Ruth Ortiz la madre de los pequeños
Ruth y José Bretón asesinados por su padre, y también Rocío Viéitez, la madre
de Amalia y Candela Oubel, fallecidas a manos también de su padre.
Un
funeral católico y multitudinario. Según ha podido saber Religión
Confidencial, el cardenal arzobispo de Madrid centró su homilía en tres
palabras: amor, sabiduría y silencio.
Amor, sabiduría y
silencio
Un
feligrés que acudió al funeral cuenta a RC algunas ideas de la plática del
cardenal Osoro: “La primera lectura fue de San Pablo a los Corintios, el himno
a la caridad. El arzobispo alentó a los padres y familiares de Diana Quer
a agradecer la vida de Diana y el tiempo que han pasado a su lado.
Además, resaltó que Diana transmitía amor, tal y como le habían comentado sus
familiares y amigos, porque la gente se sentía muy a gusto junto a ella”.
Las
otras dos palabras que resaltó el cardenal Osoro fueron sabiduría y silencio.
“El arzobispo afirmó que, frente a sucesos tan dramáticos de nuestra vida que
no entendemos, en el silencio podemos encontrar muchas veces la respuesta. Hizo
referencia a la Virgen, que dijo sí al Señor, a un plan que ella tampoco
entendía”, comenta el mismo feligrés.
Al
finalizar la misa el párroco de Santa María de Caná, Jesús Higueras, dijo
también unas palabras. Alentó a la gente a dar las gracias por la vida de
Diana, "por haberla tenido entre nosotros y disfrutar de su presencia. La
vida de Diana Quer ha sido un regalo corto, pero intenso".
Funeral impresionante
“Este
funeral ha sido impresionante. Como ha dicho algún medio de comunicación, ha
reunido a las víctimas más mediáticas, pero eso no es lo importante. Lo
llamativo es que se han despedido de ella con una celebración católica”,
manifiestan a RC algunos asistentes.
El
padre de Diana, Juan Carlos Quer, deseó ayer, las puertas de la iglesia
donde se celebró el funeral por su hija, que su asesinato “no quede solo en una
página de sucesos” y que su crimen “suponga un antes y un después para lograr
una sociedad más segura”, informa Efe.
“Tenemos
un extraordinario dolor, compartimos esta ceremonia con familiares y amigos y
porque eso es lo que hubiera querido mi hija. Queremos compartir este momento
con las personas de bien que de modo desinteresado han contribuido a la
resolución de la localización del cuerpo de mi hija. Especial reconocimiento
al pueblo gallego y al resto de España por la solidaridad y cariño que nos
han transmitido", ha señalado.
Por
su parte su madre dijo: «Mi hija ha sido elegida por Dios para cumplir una
tarea y dar un mensaje». Con estas palabras despidió el párroco de Santa María
de Caná de Pozuelo de Alarcón (Madrid), Jesús Higueras, la homilía por el alma
de Diana Quer. Se las había dicho su madre, Diana López-Pinel, antes de
comenzar la ceremonia,
Fuente:
ReligionConfidencial