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| Foto: Parroquia San Sebastián Mártir. Dominio público |
«Ya hay apuntadas doce parejas y el objetivo es llegar a las 18, el límite que nos hemos puesto por la capacidad de la parroquia», afirma Javier Sánchez-Cervera, el párroco del templo. La mayoría de ellas son de la localidad madrileña, «para facilitar después que continúe el vínculo con la Iglesia», añade.
Es lo que ha pasado con los 18 matrimonios que se casaron el año pasado. «Hay seis parejas que están haciendo el curso Alpha de crecimiento en la fe y otras que se han incorporado como catequistas de la parroquia», cuenta Sánchez-Cervera. Varios de ellos son además «tutores de las parejas que se están preparando para la celebración de este año».
Hace unos pocos días, el obispo auxiliar de Madrid José Antonio Álvarez estuvo de visita pastoral en la parroquia y varios de los nuevos matrimonios tuvieron la oportunidad de contar su experiencia tanto en la celebración del enlace, como en la vida de fe que han querido llevar después. «Después de la macroboda hemos tenido varias reuniones para saludarnos y rezar juntos, y también para ver las fotos y vídeos que se hicieron», cuenta el párroco. Y hace unas semanas fueron todos juntos a ver a las clarisas de Cantalapiedra «para agradecer las oraciones» que hicieron por este evento que marcó sus vidas.
De este modo, la macroboda fue solo
el comienzo de «un camino de crecimiento en la fe», que ha permitido a estos
matrimonios «descubrir a la Iglesia como madre y parte de su familia», sobre todo al comprobar «a
tanta gente de la parroquia que se volcó con ellos en los preparativos».
Gracias a todo ello, han descubierto que «la parroquia es su casa, y eso les
hace estar muy agradecidos y con muchas ganas de colaborar».
Juan
Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
