HOY EL RETO DEL AMOR ES QUE TE ILUSIONES CON LOS REYES MAGOS

Desde la oración

Hola, buenos días, hoy Joane nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.

¡Llegan los Reyes! Esta noche es especial, es la noche de la ilusión, de la esperanza.

Creo que será porque casi terminarán su viaje aquí en Lerma, los Reyes vienen pronto por la mañana a cada una de las celdas a despertarnos. ¿Cómo crees que dormimos? ¡Como los niños! Es un día que vivimos con mucha ilusión.

Parece que todo apunta a que este año todo va a ser distinto, la ilusión está un poco apagada, y esto hace que nos “hagamos mayores”, acallando la esperanza.

Los Reyes Magos fueron, se fiaron de una estrella brillando en medio de la noche. Siguieron su rastro en busca del Niño que llenaría sus vidas de esperanza. Y, una vez lo encontraron, se llenaron de tal manera sus corazones, que ahora son ellos los que traen esperanza a las casas cada año. Ellos nos dicen: “Seguid la Estrella, ¡en Jesús está lo que necesitáis!”.

Entra en ti, busca a ese niño que tienes dentro, ese niño que se ilusiona, que limpia los zapatos, que duerme con un ojo abierto y los oídos atentos. Aunque seáis mayores o pocos... este año necesitamos que los Reyes nos traigan a Jesús.

No dejes que la noche pueda a la Luz de Belén. Piensa cómo puedes hacer de mañana un día especial, un día desde la Esperanza. Puede ser tarde para escribir la carta, pero... los Reyes son muy sabios, y aún estás a tiempo para pedirles algo de última hora para los que tienes cerca, algo que les haga sentirse queridos, sentirse involucrados en esta historia de amor.

¿Qué le gusta a cada uno? ¿Con qué disfruta? Ora por esas personas con las que estarás y pide a los Reyes algo concreto para cada una, algo que no sea un regalo “sin más”, sino algo que les haga sentirse queridos, mirados, amados personalmente. Puede ser que les dejen una carta de tu parte, un detalle con el que entres en su mundo, una oración tuya por ellos...

Hoy el reto del Amor es que te ilusiones con los Reyes Magos. Limpia los zapatos y piensa qué quieres para cada uno de los tuyos, qué puede ayudar a que entre la Ilusión y la Esperanza. Y, si sabes de alguien que esté solo, pide algo sencillo para esa persona.

VIVE DE CRISTO

Fuente: Dominicas de Lerma