Trató
“de ayudar a judíos rellenando partidas de bautismo, su esfuerzo logró salvar a
unas 100 personas”
Hoy 25 de agosto se cumplen 115 años del nacimiento de Santa Faustina Kowalska, con
motivo de esta importante fecha la distribuidora European Dreams Factory ha
lanzado un extracto de la película “La Divina Misericordia” en donde se cuenta
cómo el confesor de Santa Faustina salvó de morir en el Holocausto a más de 100
judíos.
En
este clip de vídeo se cuenta el gran trabajo que realizó el beato P. Michal
Sopocko, confesor y director espiritual de Santa Faustina Kowalska, en la
difusión de la devoción del mensaje de la Divina Misericordia, pero también fue
decisiva su actuación en la ayuda a judíos perseguidos por el régimen nazi.
En
1941, cuando la ciudad de Vilna (Lituania) quedó bajo la ocupación alemana, el
padre Michal Sopoćko prestó ayuda económica y espiritual a la población judía.
Esto le acarrearía graves consecuencias, hasta el punto de poner en peligro su
vida y verse en la necesidad de huir.
Trató
“de ayudar a judíos rellenando partidas de bautismo, su esfuerzo logró salvar a
unas 100 personas”, explican en la película. Sin embargo, su esfuerzo levantó
las sospechas de la Gestapo, “que consiguió localizarles y emitió una orden de
arresto”.
La
película “La Divina Misericordia”, que se estrenará en España el próximo 25 de
septiembre, recoge la vida de Santa Faustina, así como los mensajes que recibió
de Jesús y su misión de recordar al mundo una verdad luminosa y consoladora: el
rostro esencialmente misericordioso de Dios.
Describe
el proceso de elaboración del cuadro y explica cómo nació y se difundió por
todo el mundo el culto a la Divina Misericordia.
Según
European Dreams Factory, el film presenta hechos desconocidos, documentos
recientemente divulgados y análisis científicos que aportan nuevos datos sobre
estas preciosas apariciones.
Algo
que refuerza especialmente la veracidad de las apariciones de Jesús a Santa
Faustina, al constatarse las grandes similitudes entre la imagen de la Divina
Misericordia y la Sábana Santa de Turín.
Fuente:
ACI Prensa