Van 100 días de
manifestaciones con 91 muertos y cientos de presos políticos. Leopoldo López
deja la prisión
La
108º asamblea ordinaria de la Conferencia episcopal de Venezuela (CEV) que
abrió este viernes 7 se encuentra reunida por una semana, cuando se cumplen los
100 días de protestas en Venezuela contra el régimen de Nicolás Maduro, que en
la represión ha dejado un saldo de 91 muertos y aumentado los presos políticos
a varios centenares.
La
Plenaria que cuenta con la participación de los obispos de de Venezuela,
representantes de Caritas Internacional y del Cardenal Claudio Hummes, se
desarrolla en el auditorio de la Universidad Católica Andrés Bello, en la
que se analizará durante los 7 días de trabajo, la situación que atraviesa el
país y los desafíos que impone para la iglesia.
En
la apertura, el presidente de la CEV, Mons. Padrón indicó que “la vida de
este nuevo pueblo, con sus avatares, está representada, entre otras imágenes,
por la barca evangélica en la Jesús y sus discípulos atraviesan el Lago de
Galilea y se ven zarandeados por una violenta tempestad que les causa pánico,
mientras el Maestro, en cambio, dormía. Pero la barca se sostuvo”.
Reconoció
que “la Conferencia Episcopal ha jugado en los últimos años un papel más
determinante y manifiesto en el ámbito político-social” precisando entretanto
que fue “sin caer en la tentación de asumir actitudes partidistas y sin
dedicarse a buscar el poder”. Por el contrario “ha ejercido una función civil
subsidiaria en el sentido de que ha expresado continuamente su juicio moral en
asuntos económicos, políticos y sociales, porque están por medio los derechos
fundamentales de la persona”.
Señaló
además que la Cáritas “ha cumplido 58 años de existencia sirviendo a los mas
necesitados” como “el Buen Samaritano”, cuando “en Venezuela aumentan y se
prolongan las protestas, el hambre, la delincuencia sin saber hasta dónde y
hasta cuando”.
Por
ello dijo, “Caritas está desarrollando diversos programas” como el de las
“ollas comunitarias” gracias a las cuales la gente no solo ha aprendido a
combatir solidariamente el hambre física sino también el hambre de ánimo para
vivir” sumada a “la grave crisis de la salud” pues “acude mucha gente en busca
de medicamentos”. Todo esto hace que de “alguna manera Caritas, sin decirlo, y
sin apoyo oficial, está abriendo su propio ‘canal humanitario’”.
En
este panorama Leopoldo López, el más notable preso político del gobierno del
presidente Nicolás Maduro, fue liberado el sábado de la cárcel militar de
Ramo Verde, pasando a los arrestos domiciliarios, abriéndose así
una posibilidad de una negociación entre el mandatario Nicolás Maduro y la
oposición. Por su parte la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega,
criticó la medida: “No se puede usar a las personas privadas de libertad
como si fuesen unos rehenes que pueden ser objeto de negociación, tal como lo
hacen algunos grupos delictivos con las personas que secuestran”.
Fuente:
Zenit