Políticos, toreros y famosos defienden la
celebración más importante de los católicos tras los ataques de Podemos
La
ofensiva de Podemos contra la Iglesia Católica va creciendo, y no solo en el
ámbito parlamentario, con iniciativas de todo tipo. La última ha sido pedir que
se retiren los capellanes de las unidades militares y suspender la emisión de
la Santa Misa que retransmite los domingos Televisión Española.
Esta
petición se ha materializado en una Proposición No de Ley (PNL) registrada en
el Congreso y calificada por la Mesa. Por lo que en cualquier momento el Pleno
puede debatir si es conveniente que un canal público emita la celebración de la
liturgia.
Desde
que comenzó la Legislatura, Podemos intenta por todos los medios que el
Congreso y el Senado se pronuncien en contra de la financiación de la Iglesia,
aunque aún no lo ha conseguido. Este mismo mes, la Comisión Mixta para las
Relaciones con el Tribunal de Cuentas rechazó una petición de Podemos y el PSOE
para que este organismo fiscalizara los fondos públicos que recibe la
Conferencia Episcopal, a través de la casilla que los contribuyentes pueden
seleccionar en su declaración de IRPF.
En
enero, este grupo parlamentario también registró otra PNL con la que quieren
instar al Gobierno a elaborar un calendario de adaptación de cinco años para
que la Iglesia se autofinancie. El objetivo final de esta propuesta es que se
revisen los beneficios fiscales de la Iglesia Católica, especialmente las
exenciones sobre el Impuesto de Bienes Inmuebles.
Orgullosos de su fe
La
última iniciativa ha sido esta misma semana cuando han presentado otra
Proposición No de Ley para su debate en la Comisión de Cultura relativa al
inventariado de bienes inmatriculados por la Iglesia Católica Apostólica Romana
(ICAR). Todavía no ha sido calificada por la Mesa.
Una
ofensiva que choca con el sentir de la mayoría de los españoles, ya que el
69,8% se declaran católicos según el último barómetro del CIS. Además 10
millones asisten regularmente a Misa. En el último año se celebraron 9,5
millones de eucaristías en las 23.071 parroquias que hay en España, 11.396
ubicadas en zonas rurales. Entre los fieles practicantes, los hay con rostros
bien conocidos y orgullosos de reconocer sus creencias, tal y como demuestran
en estas páginas.
A
ese elevado número de fieles que van a Misa, se suman muchos otros que no
pueden asistir a la parroquia y optan por seguir las celebraciones a través de
la televisión pública. Un programa que además tiene una cuota media de espectadores
de un 6,6 por ciento frente al 2,6 de la cadena. Desde hace más de 30 años, la
parrilla de La 2 de TVE retransmite cada domingo la Santa Misa en directo desde
una parroquia diferente de España. De media el programa cuenta con 327.000
espectadores. Su subdirector, el salesiano Javier Valiente, explica que este
programa ha sobrevivido a gobiernos «de todo signo» y que se somete cada
domingo a una especie de «referéndum».
Anticlericalismo
«trasnochado»
El
programa no es «un privilegio de la Iglesia católica» como sostiene Podemos
sino un servicio público que atiende al derecho a la libertad religiosa,
recordaba estos días el presidente de la Conferencia Episcopal Española, el
cardenal Ricardo Blázquez, quien cree que el «anticlericalismo está
trasnochado». Las demás confesiones religiosas que tienen reconocido el notorio
arraigo en España -como los evangélicos, judíos y musulmanes- también cuentan
con sus programas.
Fuente:
ABC