Esperando en él
Dominicas de Lerma |
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al
Señor. Que pases un feliz día.
Ya están los rosales a punto de abrirse. Aún
está el capullo verde, pero pronto, muy pronto, se abrirán muchísimas rosas a
la vez.
Lo que sucede es que las necesitamos para el
domingo, porque es Pentecostés, y tenemos una tradición muy bonita, en la que
utilizamos pétalos de rosas como símbolo de las lenguas de fuego del Espíritu
Santo.
En realidad esto es lo que me hace tener prisa,
y mi deseo es que se abran ya. Pero me he encontrado con la limitación de que,
por mi parte, solo puedo regarlos, cuidarlos y, después, esperar a que siga su
curso.
Esto me habla precisamente del Espíritu Santo,
que va a su ritmo, y hace florecer los dones de nuestra vida cuando a Él le
parece mejor. Nuestra parte es plantar la semilla que el Señor nos regala,
cuidarla y regarla cada día con la oración y el amor, pero es Él quien va
madurando esa semilla en nuestro interior. Y, cuando considera que ya estamos
listos, pues sencillamente florece Su Vida en nosotros, da fruto y se
multiplica.
Así es el Señor: no le podemos manipular, pero
precisamente ahí está amándonos, porque, si nos diera todo lo que le pedimos al
momento… Él va cuidando nuestro camino, aunque no siempre entendamos sus
ritmos. Nos hace crecer hacia Él y no se deja ningún detalle.
Qué regalo poder confiarnos a un Amor así. Solo
en Él está nuestro descanso, nuestra Vida. Tengo la esperanza firme de que para
el sábado por la tarde muchas de esas rosas se habrán abierto. Ni más ni menos
que las que vamos a necesitar. Él es así, nos da todo lo que necesitamos
gratuitamente, pero solo lo vemos cuando confiamos y esperamos en Él.
Hoy el reto del amor es confiar tu vida y tus
frutos al Señor. Es Él quien se ocupará de todo en ti y, cuando le dejamos
actuar, forma un maravilloso jardín repleto de sus flores favoritas, las de la
confianza y la sencillez.
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!
24 mayo 2023
Fuente:
Dominicas de Lerma