COLABORACIÓN DE JUAN CARLOS CARVAJAL PARA ESTE DOMINGO

El Bautismo del Señor (Ciclo A)

MONICIÓN DE ENTRADA

Buenos días, hermanos, sed bienvenidos a la Celebración del Domingo.

Hoy celebramos el Bautismo del Señor. Con esta fiesta concluimos las celebraciones del tiempo de Navidad y de Epifanía, a la vez que iniciamos el tiempo ordinario.

Con el bautismo, Jesús recibe el don del Espíritu y su humanidad se prepara para cumplir el plan de salvación que el Padre le ha encomendado. Esta salvación se actualiza en cada Eucaristía.

Preparémonos a celebrar con gozo el Banquete que el Señor nos prepara en su Cuerpo y en su Sangre.


MONICIÓN A LAS LECTURAS

Nuestro mundo parece reclamar un salvador.

Las injusticias, el terrorismo, la pobreza, las rupturas familiares, el odio, el rencor…, todo lo que amenaza la vida y el futuro del hombre parecen tener la última palabra. En lo más profundo de nuestra alma sentimos que necesitamos que alguien venga a salvarnos.

Dios nos presenta a Jesús como Hijo suyo, aquel que viene a salvar el mundo. ¿Comprendemos cómo nos salva? ¿Aceptamos su modo de salvarnos?

Escuchemos la Palabra de Dios, ella nos llevará a reconocer a Jesús como el Ungido de Dios.


ORACIÓN DE LOS FIELES


A cada suplica respondemos: ¡Señor, escúchanos!

- Por el Papa, los obispos y por quienes tiene una responsabilidad pastoral en la Iglesia, para que sirvan con caridad al Pueblo de Dios. OREMOS.

- Por nuestros gobernantes, para que miren por el bien de los más pobres y en sus decisiones políticas busquen la concordia de nuestro pueblo. OREMOS.

- Por todos los bautizados, para que según la gracia que recibida en el Bautismo seamos testimonio vivo del Evangelio. OREMOS.

- Por los cristianos perseguidos, para que la fuerza del Espíritu les sostenga y nosotros encontremos en ellos el estímulo para vivir con arrojo nuestra fe. OREMOS.

- Por los que ha nacido como hijos de Dios en la Pila bautismal de nuestra Parroquia, para que lleguen a reconocer la gracia recibida. OREMOS.


ORACIÓN FINAL


Gracias, Padre bueno,
porque nos has dado a tu Hijo, Jesús, como salvador;
Tú hiciste descender sobre Él tu Espíritu
para que cumpliera tu plan de redención.

Señor, aunque no lo reconoce,
la humanidad necesita que tu Hijo la rescate;
aunque pretende ser autosuficiente,
necesita abrirse a la gracia que viene de Él.

Padre Dios, nosotros reconocemos a Jesús,
como nuestro Salvador y Señor;
te damos gracias, porque cuentas con nosotros
para ser testigos de su entrega de amor.

Te pedimos, que nos ayudes a acoger
la gracia del Bautismo,
que sea ella la que nos haga superar nuestros miedos;
la que nos dé la valentía
para afrontar la increencia que nos rodea;
y nos otorgue el amor necesario
para llevar a los hombres hacia Ti.

Padre bueno,
gracias por reconocernos como hijos tuyos.
Ayúdanos a permanecer unidos a Jesús.
Amén.