El doctor Jesús Poveda ayuda a mujeres en riesgo de aborto todos los días del año excepto uno: el 28 de diciembre, fiesta de los Santos Inocentes, en el que en cada año realiza un acto de resistencia pacífica que termina con su detención
ACI Prensa |
Así ha sucedido el pasado sábado a las puertas del centro de
abortos Dator de Madrid, donde Poveda se sentó en el suelo, negándose mediante
resistencia pacífica a levantarse del lugar ante las reiteradas indicaciones de
la Policía Nacional.
Finalmente, varios agentes de las unidades antidisturbios
sacaron del lugar en volandas al doctor, que fue esposado y conducido a
dependencia policiales, donde permaneció durante 12 horas.
En el programa Sexto
Continente de Radio María España, que dirige el Obispo de
Orihuela-Alicante, Mons. José Ignacio Munilla, Poveda ha compartido algunas
lecciones que ha aprendido a través de sus anuales estancias en los
calabozos.
El veterano voluntario provida expuso la importancia de
vivir el desprendimiento dentro de la celda. “Te cachean y te quitan todo. Me
quitaron hasta el escapulario para que no me ahorcara, lo cual sería un poco el
colmo de un provida”, detalló con ironía.
Más en serio, expuso que en esa circunstancia le viene a la
mente la expresión del Papa Francisco que subraya que en los funerales nadie
lleva el camión de mudanzas tras el coche fúnebre.
Por otro lado, destaca el beneficio de “compartir
situaciones con los ‘compañeros’ de celda”, conocer sus situaciones y constatar
la necesidad de contar con una buena asistencia legal.
“Tenían interés en que pasara la noche. He sido privado de
libertad durante 12 horas y tenían intención de que pasara ahí la noche, pero
gracias a que yo no gasto en abogados sino que invierto en abogados, llegó el
abogado y justificó que no tenía ningún tipo de antecedentes, que yo lo único
que hice fue desobedecer, que sí que hubo una cierta resistencia, pero en
ningún momento violencia”, expuso.
“Entonces hizo ver al policía que en ese momento hacía de
secretario judicial que no tenía sentido que pasara ahí la noche. Pero la
intención era: Este hombre nos ha desobedecido una vez más, este hombre va a
estar aquí en la medida de lo posible retenido mucho tiempo. Estuve doce horas,
que no está mal”, detalló, antes de compartir que “en doce horas se reza muy
bien”.
Por otro lado, el doctor Poveda compartió algunas de las
características de la libertad que ha tenido oportunidad de reflexionar durante
sus cortas estancias en los calabozos desde los años 80 del pasado siglo.
“La libertad tiene que ser libre y se apoya en la Verdad. La
verdad te hace libre, si no no puedes ser libre”, afirmó, antes de señalar que
“la mentira es el aborto, la mentira es la eutanasia… La mentira no te permite
ser libre”.
Para ejercer la libertad, además, valoró la independencia:
“Hay que ser independiente. Si tú dependes de un estado injusto, vas a acabar
haciendo cosas injustas, porque si no te van a acabar retirando la
subvención”.
“Tantas oenegés que empezaron con un cierto frescor para
ayudar acaban siendo lo contrario a lo que empezó porque no son verdaderamente
independientes”, lamentó.
En este sentido argumentó sobre la importancia de la
economía: “Más vale que 100 personas te den un euro que el Estado te de 100
euros, porque al Estado cuando no le salgan las cuentas te lo va a dejar de
dar”.
Para el doctor Poveda, la libertad también está muy
relacionada con la belleza que, como han expresado de manera destacada los
clásicos de la literatura rusa, “salvará al mundo”.
Así, destacó la belleza del respeto a la vida, de un
embarazo, de una familia, “frente a la vileza o al horror”.
Por último, consideró que “la Libertad conlleva una
responsabilidad. Las personas que somos y nos sabemos libres tenemos que ser
responsables de sabernos libres y no podemos ir por donde van todos, o por lo
que todo el mundo hace”.
“Hay que ser responsable, que como su propio nombre indica
es responder a lo que está pasando”, insistió.
Por Nicolás de Cárdenas
Fuente: ACI Prensa